¿Podemos medir el valor de nuestro tiempo?
Construir una metodología de trabajo que nos ayude a no caer en la “trampa de las tareas”. Recuerde que una persona ocupada no siempre es la persona más productiva.
Antes de responder a esta pregunta, le invito a que hagamos una reflexión previa: ¿estamos preparados para tomar consciencia de qué hacemos con nuestro tiempo? El tiempo es un regalo limitado e inalterable. Estas particularidades, nos suelen llevar a dar más valor a los resultados a corto plazo.
Por ello, son muchas las prácticas que aprovechan esta visión cortoplacista: cómo aprender inglés en tres meses, cómo ser un líder efectivo en un mes, cómo conseguir record de ventas en una semana... Hemos crecido en una sociedad de prisas y urgencias, que no favorece los resultados con valor.
Cuando alguien practica una óptima gestión de su tiempo, se produce un aumento natural de su productividad. Pero existe un matiz que debemos tener en cuenta: hacer más cosas en menos tiempo, no nos hace más productivos. Necesitamos cambios más profundos que nos permitan identificar el valor de las cosas que hacemos y comenzar por ser más eficientes. En definitiva, necesitamos sistemas que de forma constante y en tiempo real nos ayuden a tener claros nuestros objetivos a largo plazo, identificar las actividades que nos reportan más valor, nuestros proyectos más rentables... y sobretodo, construir una metodología de trabajo que nos ayude a no caer en la “trampa de las tareas”. Recuerde que una persona ocupada no siempre es la persona más productiva.
Para muchos estas doctrinas serán recurrentes, y para otros, serán un nuevo motor en la búsqueda de su mejora continua. En realidad, los principios en los que se basan nacieron hace más de 100 años. Sirvan de ejemplo entre muchas: la ley de Pareto donde se argumenta que únicamente el 20% de las acciones producen el 80% de los resultados; la ley de Parkinson, donde se defiende que la mente siempre tiene tendencia a ocupar todo el tiempo que dispone para realizar una tarea, igual que el aire ocupa toda una habitación. Ambos argumentos, cuestionan abiertamente la gestión que hacemos del tiempo y nos esgrimen algunas claves para obtener mejores resultados.
Imagínese que los minutos que dispone son monedas que al final del día perderá si no las ha gastado. Seguro que en términos económicos, querría invertir sus ahorros en las actividades que más valor le repercuten. ¿Cómo saber en qué actividades debo invertir? En definitiva, ¿cómo podemos medir el valor de nuestro tiempo?
- Evalúe su organización como un conjunto, no evalúe sus resultados por áreas o departamentos. Potencie esa visión integral.
- Aprenda cada día de sus indicadores. No tenga miedo a hacer cambios.
- Identifique las actividades con mayor valor y las más prescindibles. Aprenda a dedicar su mayor esfuerzo a las tareas que dan significado a su negocio.
El Sistema de Gestión IDINET de Futuver ha nacido bajo esta premisa: